miércoles, 23 de marzo de 2011

EL FRENTE NACIONAL ANTE EL ATAQUE ARMADO A LIBIA



     El Frente Nacional se manifiesta absolutamente contrario a la intervención armada de nuestra Nación en el conflicto de Libia, una guerra como las de Afganistán, Irak, Yugoslavia, Libia, Somalia, etc; movidas únicamente por intereses económicos y geoestratégicos que son ajenos a los intereses de España.

    Si bien el dictador Gadafi con el que se abrazaban y fotografiaban hasta hace unos meses muchos de los dirigentes occidentales, cabezas reales incluidas, no nos merece mucho respeto y más conociendo su vinculación con ETA, el terrorismo internacional y su apoyo a la islamización de Europa, el Frente Nacional defiende la independencia del pueblo libio a tomar sus decisiones sin subyugarse a los intereses bastardos del imperialismo yanki-sionista, temiendo que como todas las intervenciones militares que le han precedido solo sirvan para sustituir regímenes políticos que no son de la cuerda de los Estados Unidos por un caos del que se aprovechan los radicales islamistas, como podemos ver en Irak, con el especial agravante de que Libia está a las puertas de Europa.
     El Frente Nacional denuncia el servilismo hipócrita del gobierno de ZP que con una nación sumida en una crisis económica profunda se lanza a una aventura internacional para obtener el beneplácito de su amigo de la Casa Blanca, el mismo beneplácito que buscó Aznar al intervenir en la guerra de Irak y que entonces criticara el PSOE y toda la corte de presuntos intelectuales y artistas de la izquierda progre-subvencionada, que hoy consideran esta agresión armada como un “mal menor”

      El Frente Nacional recuerda que existen numerosas resoluciones de la ONU que no se cumplen y no por ello hay una intervención militar para imponer su cumplimiento, como es el caso del Sahara, antigua colonia española o de la ilegal ocupación de territorio palestino por parte de Israel.

     La desestabilización provocada por intereses económicos en la zona va a traer una nueva remesa de inmigrantes hacia una Europa que desde hace tiempo ya no puede acoger a más. El Frente Nacional considera una política suicida tener las puertas abiertas ante los inmigrantes mientras se destruye y arrasa sus países de origen menoscabando su independencia.

     Por ello el Frente Nacional propone algo que es de sentido común: cerrar nuestras fronteras a la inmigración y apoyar la libertad y soberanía de los países árabes.